Bitácora de un carpetoedetánico curioso donde van a parar todos los conocimientos aparentemente inútiles.

Sígueme en las redes para no perderte nada

sábado, 21 de julio de 2018

¿Los cinco países mas curiosos del mundo?


Hoy quería escribir una entrada nueva pero, como me pasa muchas veces, el miedo al folio en blanco (o pantalla) me ha paralizado. No obstante no quiero frenarme en esta nueva etapa así que voy a hacer un poco de trampa. Aprovechando que empecé este blog hace ya siete años y que ha estado tres en barbecho haré un recopilatorio de cinco entradas antiguas que me parecen muy interesantes, mis entradas sobre cinco pequeños países no reconocidos en la ONU, pero con curiosas circunstancias legales. Y como imagen pondré al que ya he señalado como responsable de este post:

folio+hoja+pagina+blanco

Vayamos allá con el recopilatorio, no dudéis en pinchar los enlaces para leer las historias completas de estos peculiares territorios:

-Empecemos con Tavolara una pequeña isla del Mediterráneo que gracias a unas cabras con los dientes de oro y a una broma real se transformo en el reino mas pequeño del mundo.

-Otro territorio con récord, La Republica de la Isla de las Rosas, en menos de cinco años "emergió" de las aguas, se pobló, declaró su independencia, fue ocupado y volvió a desaparecer en las aguas del Mediterráneo.

-¿Cuando acabo el feudalismo? ¿En el XVI?, ¿En el XVII? En la isla de Shark, en el Canal de Mancha, perduró este sistema hasta el 2008. No os perdáis su historia y sus extrañas costumbres aun vigentes. Por tener, tiene hasta una invasión de un solo hombre.

-De un estado feudal pasamos a uno eminentemente religioso, el Estado Monástico Autónomo de la Montaña Sagrada, en el monte  Athos, en Grecia... o no. Un curioso lugar con unas leyes un tanto especiales.

-Y finalizamos con el que tengo mas cerca. La aldea de Goust, en los Pirineos, puede proclamar orgullosa que es la república mas pequeña del mundo. Y no solo porque lo digan ellos,  en 1648 Francia y España reconocieron su independencia, y no hay ningún documento  que contradiga esta proclamación, por la tanto es aun independiente hoy en día. Si leéis la  entrada completa aparte de esta historia descubriréis su curioso sistema funerario.

A los que leáis estas entradas por primera vez espero que os hayan gustado, y los que ya las conocíais supongo que habréis disfrutado releyéndolas tanto como yo. Y prometo que la próxima sera una entrada original.

sábado, 14 de julio de 2018

Lacónico


¿Por que llamamos lacónicos a la gente que habla poco y casi siempre con sentencias certeras? Pues porque en Laconia hablaban así.

¡Hala!, ya tengo mi entrada hecha, no me digáis que no he sido lacónico.



Bueno, tampoco hay que ponerse así, solo ha sido una pequeña broma, contaremos algo mas de esta Laconia en la que hablan poco, aunque no creo que tan poco como en las maravillosas cartas de Victor Hugo y su editor.

laconia+lacedemonia+esparta+laconico+espartano

Laconia, también conocida como Lacedomonia era un región de la Grecia antigua cuya polis mas importante e influyente era Esparta. Todos conocemos la austeridad y rigidez de la educación esparta, siempre enfocada a la formación de excelentes soldados. Incluso también aparece en el DRAE el adjetivo espartano, definido como "Austero, sobrio, firme, severo". Entre las cualidades buscadas en esa rígida educación también estaba la de expresarse en pocas palabras pero muy certeras. Seguramente el permanente enfrentamiento con Atenas reforzaría esta manera de hablar, contrarrestando la rica  retórica (la cháchara insoportable supongo que le dirán los espartanos) de los oradores atenienses. Un ejemplo de este laconismo lo tenemos en la mítica frase con que las madres despedían a sus hijos cuando les daban el escudo para ir a la guerra: "Vuelve con él o sobre él". No se puede condensar mas mensaje con menos palabras. O la inmortalizada en la película 300 cuando alguien dice que las flechas no dejaran ver el sol, a lo que un espartano contesta "Mejor, lucharemos a la sombra".

No es de extrañar que el termino lacónico se fuera aplicando a quien se expresaba de esta manera, pero el máximo responsable de su popularización fue el gran Plutarco, escritor grecorromano del primer siglo de nuestra era. Entre sus muchas obras publicó "Apotegmas de los lacedemonios", donde recogía multitud de  "frases lacónicas" pronunciadas por espartanos celebres. Y de aquí  a la fama, el uso de la palabra se fue extendiendo primero en latín, y luego en castellano, siendo ya recogida en el "Diccionario de autoridades" como: "Breve conciso y compendioso. Dícese siempre del estilo, aludiendo al modo que tenían de hablar los lacedomónios, los cuales afectaban concisión en su estilo".

Al final me ha quedado una entrada muy poco lacónica pero espero que haya sido clara y del agrado de mis amables lectores. Y no, no voy a poner la definición de Apotegma, no os quiero robar el placer de buscarla vosotros mismos en el DRAE o cualquier otro diccionario. De nada.

sábado, 7 de julio de 2018

Cicerón, cicerón, cicerone y cícero.


El otro día en el trabajo tuve que enseñar las dependencias del edificio a unas visitas y no pude menos que decir, "¡Vaya!, ya me toca hacer de cicerone una vez mas". Una de mis compañeras al oírme me preguntó "¿que quiere decir exactamente eso de cicerone?, lo he oído decir alguna vez pero nunca he tenido del todo claro su significado, ¿no es alguien que habla mucho?". La verdad es que este significado también tenia sentido, dado que  Cicerón era famoso por sus elaborados discursos. Y como no podía ser de otra manera me lance a consultarlo en el DRAE, pero tuve la fortuna de consultarlo en papel, lo que me llevo a descubrir que hay hasta tres palabras que derivan del orador romano, y que efectivamente mi compañera también tenia parte de razón. Con estas tres palabras y el propio Cicerón ya tenia material para una nueva entrada, esta que ahora mismo estas leyendo.

ciceron, cicero cicerone

Marco Tulio Cicerón fue un político, pensador, filosofo, escritor, jurista y orador romano del siglo I antes de Cristo. Llego a ser cónsul y durante su consulado se enfrento a una conspiración liderada por Catilina. Ya considerado un gran orador los grandiosos discursos contra Catilina en el Senado le encumbraron como el mas grande  de la época republicana. No es el objetivo de esta entrada contar la vida del gran Cicerón pero no puedo evitar recordar dos frases suyas a las que se ha enfrentado todo buen estudiante de latín. "Oh tempora, o mores!" (Oh tiempos, oh costumbres) y, mi favorita, "Quosque tandem abutere, Catilina, patientia nostra?" (¿Hasta cuando abusaras, Catilina, de nuestra paciencia?).

Cicerón, así, sin la "e", es según el DRAE "Persona muy elocuente", obviamente por Cicerón. Lo cual le da parte de la razón a mi compañera. Comentar también que en el diccionario panhispánico de dudas nos recuerda expresamente que no debe confundirse con cicerone, nuestra siguiente palabra.

Cicerone viene definido como "Persona que enseña y explica las curiosidades de una localidad, edificio, etc."  Ademas, leyendo la etimología en el propio diccionario me encuentro con la sorpresa de una preciosa palabra que desconocía, "facundia", que significa "Facilidad y desenvoltura en el hablar". Exactamente lo que nos dice esta etimología es que cicerone viene de Cicerón por la facundia de estos guías, precioso.

Y por último otra sorpresa, Cícero. Como decía antes esta palabra la descubrí gracias a consultar el diccionario en papel, ya que esta por encima de las dos anteriores. Cícero es un tipo de letra, mas exactamente un tamaño, usado en las antiguas imprentas. ¿Y que tiene que ver con Cicerón? pues que el tipógrafo Fournier, se baso en la impresión veneciana de algunas obras de Cicerón para crear este nuevo tamaño de 12 puntos y en honor al gran orador le puso el nombre de Cícero. Supongo que, como yo, os estaréis preguntando si esos 12 puntos tiene algo ver con los 12 puntos que generalmente usamos como tamaño de letra en nuestros ordenadores. Y la respuesta es "si pero no", efectivamente la idea de los 12 puntos es la misma, pero los puntos de Fournier eran ligeramente mayores que los que se usan en informática, por lo cual un cícero mediría unos 4,5 milímetros y una letra 12 habitual unos 4,2.

Espero que os hay gustado la entrada, aunque estoy seguro que si la hubiera escrito el gran Cicerón habría quedado mucho mas clara y elegante, que le vamos a hacer.


sábado, 30 de junio de 2018

Como decíamos ayer...


Como decíamos ayer dos maravillosos blogs (Curistoria, de Manuel J. Prieto e Historias de la Historia, de Javier Sanz) fueron los principales responsables de que hace ya mas de siete años me lanzara a la aventura de escribir mi propio blog sobre curiosidades históricas y orígenes de expresiones comunes. Y de la frase "Como decíamos ayer" y de quien la dijo vamos a hablar en esta entrada (no me digáis que no es una  manera elegante de introducir el tema de hoy).

Fray Luis de Leon Como decíamos ayer Dicebamus hesterna die mistico

Fray Luis de León fue un religioso (como habréis deducido por lo de Fray), humanista, catedrático y poeta del siglo XVI. Vamos todo un hombre del Renacimiento, aunque fuera español y fraile. Pero por ser español estaba en España y sus éxitos académicos y literarios le trajeron, en vez de reconocimientos,  multitud de envidias entre sus enemigos. Y si tus enemigos son tan poderosos como los frailes dominicos que controlaban la Inquisición no puedes esperar nada bueno. Encima el bueno de fray Luis se empeñaba en ponerles las cosas fáciles, no solo era hijo de judíos conversos, lo que ya le colocaba en el punto de mira, si no que ademas se empeñaba en traducir la Biblia a la lengua vulgar, hacerlo directamente desde la versión hebrea y empezar ni mas ni menos que por el Cantar de los cantares. Como es de suponer no tardaron en tomarlo preso e iniciar un proceso contra el que duró cuatro largos años (tan largos que algunas fuentes hablan de cinco años) durante los cuales estuvo en la cárcel. Finalmente fue absuelto y al volver a su aula en la Universidad de Salamanca comenzó la clase diciendo "Dicebamus hesterna die..." ,"Como decíamos ayer...", de esta forma daba a entender que los cuatro años que paso en la cárcel carecían de importancia, lo verdaderamente importante era seguir con sus clases y su legado. 

Miguel de Unamuno Deciamos ayer filosofo

Cuatro siglos después de esta historia don Miguel de Unamuno, otro gran filósofo amigo de crearse enemigos poderosos, también pronunció esta frase inmortal en la misma universidad. Feroz opositor al rey Alfonso XII, y sobre todo a su jefe de gobierno el dictador Miguel Primo de Rivera, no dudaba en criticarlos públicamente a la menor ocasión. Como no podía ser de otra manera en 1924 el rey lo destituye como vicerrector de la Universidad de Salamanca y lo destierra a Fuerteventura. Aunque pocos meses después es indultado él se autoexília en Francia y no volverá hasta la caída de Primo de Rivera en 1930. A su vuelta a dar clases en su querida universidad no pudo resistir la tentación de citar al gran fray Luis de León y también comenzó su clase con el famoso "Como decíamos ayer...". 

Y hoy, este juntaletras emborronador de bits se atreve a comenzar este humilde texto con la misma frase que dijeron esto dos grandes hombres. Afortunadamente nadie me ha metido en la cárcel, ni me ha desterrado  durante estos tres años y tres meses en los que esta bitácora ha estado en silencio absoluto, pero si que podría decir que he estado encerrado en la "cárcel de la pereza" y desterrado en "la isla del bloqueo ante el papel en blanco". Veremos si definitivamente he recuperado la libertad y puedo seguir adelante con este blog que tantas satisfacciones me ha dado en el pasado.

lunes, 2 de marzo de 2015

Hablando de Egipto ¿sabias que...?


Igual que hice el año pasado sobre las gallinas, este año también he escrito un pequeño texto para el llibret de mi falla, Cádiz-Cura Femenia- Puerto Rico, falla Noscarmientas. Este año el tema de nuestra falla, de la presentación y de este humilde artículo es el antiguo Egipto. 

egipto+llibret+noscarmientas+falla

-¡Che nano!, ¿Cómo vas? Este año tanto la presentación como la falla van sobre Egipto. Si me invitas a una cerveza te dejo que me des un poco la brasa sobre el tema.

-Eso está hecho, además no hace falta que disimules que sé que te encanta oír mis historietas. ¡Camarero, dos cervezas!

-¡Que gran invento es la cerveza!

-Pues mira, ya tengo por dónde empezar. ¿Sabías que la cerveza la inventaron los egipcios? No se parecía mucho a la actual ya que no llevaba lúpulo, que es lo que le da su amargor característico, pero era una bebida fermentada de cereales muy apreciada en su época. Y no solo la usaban como bebida recreativa, también era considerada un alimento e incluso se utilizaba con fines medicinales. Ya ves, hace 5.000 años ya se quedaba para “tomar unas cañitas”.

-Unos genios estos egipcios.

-Y más que te lo parecerán cuando te cuente que un objeto que usamos hoy en día, unos más que otros, también lo inventaron ellos hace unos 3.000 años. Nada más y nada menos que el preservativo.

-Pero si no conocían el plástico, ¿de qué eran?

-Efectivamente, no eran de plástico, eran de lino. Pero no me mires con esa cara, su finalidad no era la anticoncepción, si no el evitar enfermedades venéreas, para lo cual sí que parece que eran muy efectivos.

-Por lo que se ve aparte de las pirámides crearon muchas más cosas estos egipcios. Aunque cuando veo las imágenes de las pirámides no puedo dejar de pensar en los esclavos que morirían construyéndolas.

-Cierto es que los constructores de las pirámides sufrieron en su trabajo, y que efectivamente hubiera accidentes en los que morirían muchos de ellos, pero te equivocas en una cosa, los trabajadores de las pirámides eran hombres libres que tenían un empleo como cualquier otro, no eran esclavos.

-¿Cómo? ¿Acaso no tenían esclavos en Egipto?

-Sí que tenían, y muchos, pero los usaban principalmente en labores domésticas. Los constructores de las pirámides eran trabajadores asalariados, y no estaban exentos de derechos laborales. Por ejemplo se han encontrado papiros donde se enumeran las excusas válidas para no ir a trabajar, y algunas resultan especialmente curiosas, como embalsamar a un familiar, sufrir una picadura de escorpión, fabricar cerveza para una celebración, haber recibido una paliza de su mujer en una discusión familiar , e incluso la embriaguez.

-Hummm, así que si preparabas la cerveza para un entierro, luego embalsamabas el cuerpo y luego cogías una buena cogorza con la cerveza te tirabas un montón de días sin ira a trabajar. Buenos patronos eran esta gente.

-Para no serlo, ten en cuenta que estos trabajadores protagonizaron la primera huelga conocida de la historia. En tiempos de Ramses III se retrasó la parte del pago que se hacía en grano y los obreros se encerraron en varios templos en plan “sentada” y no los abandonaron hasta que se cumplieron sus exigencias.

-Tengo que reconocer que ha estado muy interesante tu cháchara, pero me parece que me voy a ir antes de que te pongas pesado, que ya se sabe que si te dan rienda suelta llegas a tocar los huevos.

-Esa bien, te dejo libre, aunque podría contarte por que hay quien defiende que la expresión “Tócame los huevos” también viene del antiguo Egipto …

-Ehh, vale, oigamos esa historia, espero no arrepentirme.

- Como te decía hay quien afirma que el uso de esa frase viene de una historia contada por el gran historiador griego Herodoto.  Según nos narra en el sur imperio había una ciudad fronteriza llamada Elefantina. El problema era que los soldados de la guarnición llevaban tres años sin cobrar su paga, y no solo se declararon en huelga, si no que decidieron abandonar la ciudad y pasarse al enemigo. El Faraón salió en su búsqueda y pronto les dio alcance, pero sabedor de que su enfado era justo intentó aplacarlos aludiendo al patriotismo y a la familia diciéndoles: no podéis abandonar a los dioses ni a vuestros hijos y mujeres. A lo que el cabecilla de los insurrectos contestó llevándose la mano a los genitales: Mientras tenga esto tendré hijos y mujeres.

-Pues ciertamente no me arrepiento, aunque que eso derive en nuestro “Tocame los huevos” me parece un poco forzado.

-Y también podría contarte como fueron derrotados por los persas gracias a los gatos.

-Huyyy que tarde es, me voy a casa que si no tendré problemas con mi mujer, y eso aquí no sirve como excusa para no ir al curro como en las pirámides.

-Pero si es muy interesante, espera no te vayas.

-Mira ya me está llamando, si cariño, ya voy

-Sera posible. Otra vez. Pues hala, este año no te lo cuento, adiós muy buenas. Señor camarero, veo que está usted con la antena puesta, no se preocupe que se los cuento. Resulta que los gatos eran sagrados para los egipcios, entonces los persas al mando de Cambises se dedicaron a arrojar gatos vivos a las tropas egipcias, las cuales escandalizadas luchaban teniendo especial cuidado en no dañar a los pobres animales, encarnaciones vivas de la diosa Bastet, lo cual les llevo a una dolorosa derrota que permitió a Persia dominar Egipto durante varios años. ¿A que a usted sí que le ha gustado la historia?

-Las dos cervezas son dos con cuarenta, y ahí tiene la puerta.

miércoles, 25 de febrero de 2015

Mantenerse en sus trece


Siento que poco a poco esta humilde bitácora se va muriendo. Las entradas se van espaciando cada vez más y más en el tiempo, y quizás llegue un día en que se "espacien definitivamente". Pero periódicamente me sobreviene el deseo de no abandonarlo y "mantenerme en mis trece" en la defensa de este pequeño rincón de la blogsfera. Y precisamente de esta frase "mantenerme en mis trece" es de la que voy a hablar hoy. Como podéis ver también me mantengo en mis trece en hacer absurdas introducciones para "hilar" alguna historia con la frase hecha sobre la que va el post. Pero ilustremos el artículo con una imagen.

Benedicto+XIII+Blackjack+quince+Maimonides

Si, efectivamente la foto es triple, porque tres son los posibles orígenes de los famosos "trece". Tengo que confesar que hasta que no escuche el segundo origen no me decidí a escribir esta entrada, "un solo origen posible es poca cosa para esta Memoria Residual".

La primera imagen corresponde a Benedicto XIII, también conocido como el Papa Luna. En los turbulentos tiempos del cisma de occidente, a caballo entre los siglos XIV y XV, había dos papas, uno con sede en Roma y otro con sede en Avignon, apoyado cada uno por diferentes monarcas europeos. Nuestro protagonista era fiel a la facción de Avignon y a la muerte de Clemente VII el cónclave de la ciudad francesa lo elige por abrumadora mayoría como nuevo papa, cogiendo el nombre de Benedicto XIII. Y aquí es donde la cosa se pone divertida, Francia le retira su apoyo ya que no se fía de que un aragonés sea tan influenciable como los anteriores papas. Ademas un nuevo papa entra en escena, en un cónclave creado en Pisa se elige un nuevo papa "buscando la reconciliación", y en este momento hay hasta tres papas a la vez, Gregorio XII, Juan XXIII y nuestro Benedicto XIII, que poco a poco va perdiendo apoyos y tiene que retirarse a Peñíscola, donde ocupa el maravilloso castillo construido años antes por los templarios. Y aquí es donde nace la conocida frase, cuando el papa Luna se aferra a su silla y proclama repetidas veces hasta su muerte "Sum papa y XIII". Por cierto, el aducía para su defensa un hecho incontestable, era el único de los tres papas que fue elegido cardenal antes del cisma.

En la segunda imagen podemos ver un Blackjack, la jugada ganadora en el juego homónimo. Aunque en realidad no vamos a hablar del Blackjack, sino de un antiguo juego predecesor de este llamado "Quince". Para ganar había que conseguir quince puntos, obvio, y era una jugada típica plantarse cuando alguien conseguía trece puntos, tan habitual era este lance que se llegaba a decir que para ganar al Quince había que mantenerse en sus trece.

Para finalizar tenemos al gran Maiomónides que en el siglo XII formuló los Trece principios de la fe judia, que con el tiempo se volverían normativos para dicha religión. Damos un salto en el tiempo y llegamos a 1492 cuando los Reyes Catolicos decretan la expulsión de los judíos, y se les da a elegir entre el bautismo o el exilio. Un buen número eligen la primera opción y son convertidos al cristianismo, pero la recién creada Inquisición Española fija sus ojos sobre ellos, y muchos son los que sufren tormento acusados de seguir practicando la religión judía, es decir que se mantenían en sus trece principios de la fe. Un solo apunte sobre esto, la Inquisición atacaba a quien siendo converso se mantenía en sus trece a escondidas, no al judío que se mantenía en sus trece y no se convertía. Ese era expulsado por la fuerza u otras cosas peores por el poder real, pero nunca seria tocado por la Inquisición, ya que esta solo se preocupaba de la pureza de los cristianos bautizados. 

Espero que os haya agradado la entrada y os emplazo a leer la próxima, llegue cuando llegue. Confío en que no tarde mucho y consiga mantenerme en mis trece

martes, 2 de diciembre de 2014

Los Cien Mil Hijos de San Luis


Gracias, gracias y cien mil veces gracias. Gracias otra vez a todos mis amables lectores que han conseguido que esta humilde bitácora llegue a la preciosa cifra de 100.000 paginas vistas. Y que mejor manera para celebrar este hito que escribir una entrada sobre "Los cien mil hijos de San Luis", aunque estos visitantes fueran absolutamente nefastos, al contrario de los habituales de este blog. Obviamente tendremos la respuesta a la pregunta obligada ¿por qué se llamaban los cien mil hijos de san Luis? y de alguna mas que surgirán, pero para que no os vayáis a mitad lectura esas respuestas estarán el final de la entrada. Y para ilustrar el tema nada mejor que la portada del "Episodio Nacional" correspondiente de don Benito Pérez Galdós.

cien+mil+hijos+san+luis+fernando+vii+riego+trienio+liberal

Nos situamos en la primera mitad del turbulento siglo XIX español. Acabada la Guerra de la Independencia se desaloja a los franceses y se consigue la vuelta de Fernando VII el deseado. Pero nada mas llegar a España da muestras de lo equivocado de su sobrenombre. La primera decisión que toma es derrocar la Constitución de 1812, La Pepa, e instaurar nuevamente un régimen absolutista, anulando todas las decisiones de las Cortes de Cadíz y tomando todo el poder para si y su camarilla, dando lugar a situaciones como la de la "negra" doña Ines. Y así es hasta 1820 en el que el pronunciamiento de Riego en las Cabezas de san Juan restaura la constitución que es jurada por el rey. Es el comienzo del llamado trienio liberal. Pero Fernando VII se prepara para cambiar su sobrenombre del deseado por el de rey felón y secretamente pide ayuda a Francia apoyado por sus partidarios absolutistas que están llenando el país de pequeños focos de rebelión entonando el terrorífico grito de "Vivan las caenas".

Luis XVIII no deja pasar esta ocasión de intervenir en la política española y manda un contingente de tropas para restaurar el régimen absolutista al sur de los Pirineos. Este contingente son los llamados "Cien mil hijos de san Luis", y efectivamente alrededor de 100.000 soldados (de 95.000 a 135.000 según las distintas fuentes) entran en España al mando del duque de Angulema y avanzan rápidamente hasta cercar al gobierno y al rey (que a regañadientes ha ido desplazándose con el ejecutivo) en la mítica ciudad de la resistencia antinapoleonica, Cadiz. Allí se da la gran batalla de esta guerra, la "Batalla del Trocadero". Tras ella las tropas liberales se rinden con la promesa real de que no se tomarían represalias. Y una vez mas Fernando VII hizo honor a su sobrenombre de rey felón incumpliendo una promesa mas. Vuelve a derrocar la constitución que ha jurado e instaura un régimen absolutista todavía mas duro que en su primera etapa. La represión es brutal comenzando por el propio Riego y siguiendo por destacados héroes de la Independencia. En esta época es cuando nace la conocida frase de "se te ve el plumero".

Y ahora la pregunta obligada. ¿Por qué se llamaban los Cien Mil Hijos de San Luis?. Pues todo viene en un rimbombante discurso que dio Luis XVIII ante las cámaras para justificar el envío de tropas a España. En el momento cumbre, buscando el aplauso fervoroso, soltó esta proclama: “Cien mil franceses, bajo el mando de un príncipe de mi familia, por aquel que mi corazón se complace en llamar mi hijo están preparados para marchar, invocando al Dios de San Luis, para mantener en el trono de España a un nieto de Enrique IV, preservar aquel bello reino de la ruina y reconciliarlo con Francia”.

Como era de esperar, de la respuesta nos surgen nuevas preguntas "corolarias":

-¿Quien era ese príncipe de su familia? esta es fácil, el ya mencionado duque de Angulema sobrino de Luis XVIII.

-¿Quien era el San Luis en cuestión? pues seguramente  Luis IX de Francia que reinó en el siglo XIII, llevado a los altares tras su muerte. Se le considera un rey-santo-héroe entre sus paisanos y fue el máximo impulsor de la Séptima y Octava Cruzadas.

-¿Quien es ese Enrique IV abuelo de Fernando VII?, ¿sus abuelos no fueron Carlos III de España y Felipe I de Parma? como nieto se refería a su descendiente, concretamente el mencionado Enrique IV era el bisabuelo de su tatarabuelo. Fue rey de Francia y el primero de la dinastía de los Borbones. El ser el primero de la dinastía común a los dos reinos le daba una importante carga simbólica al discurso.

Espero que os haya gustado la entrada y que sirva de agradecimiento a todos mis amables lectores que han conseguido que esta sea una  bitácora "cienmilvisitada".

Una vez mas, muchas gracias a todos.