Bitácora de un carpetoedetánico curioso donde van a parar todos los conocimientos aparentemente inútiles.

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martes, 2 de diciembre de 2014

Los Cien Mil Hijos de San Luis


Gracias, gracias y cien mil veces gracias. Gracias otra vez a todos mis amables lectores que han conseguido que esta humilde bitácora llegue a la preciosa cifra de 100.000 paginas vistas. Y que mejor manera para celebrar este hito que escribir una entrada sobre "Los cien mil hijos de San Luis", aunque estos visitantes fueran absolutamente nefastos, al contrario de los habituales de este blog. Obviamente tendremos la respuesta a la pregunta obligada ¿por qué se llamaban los cien mil hijos de san Luis? y de alguna mas que surgirán, pero para que no os vayáis a mitad lectura esas respuestas estarán el final de la entrada. Y para ilustrar el tema nada mejor que la portada del "Episodio Nacional" correspondiente de don Benito Pérez Galdós.

cien+mil+hijos+san+luis+fernando+vii+riego+trienio+liberal

Nos situamos en la primera mitad del turbulento siglo XIX español. Acabada la Guerra de la Independencia se desaloja a los franceses y se consigue la vuelta de Fernando VII el deseado. Pero nada mas llegar a España da muestras de lo equivocado de su sobrenombre. La primera decisión que toma es derrocar la Constitución de 1812, La Pepa, e instaurar nuevamente un régimen absolutista, anulando todas las decisiones de las Cortes de Cadíz y tomando todo el poder para si y su camarilla, dando lugar a situaciones como la de la "negra" doña Ines. Y así es hasta 1820 en el que el pronunciamiento de Riego en las Cabezas de san Juan restaura la constitución que es jurada por el rey. Es el comienzo del llamado trienio liberal. Pero Fernando VII se prepara para cambiar su sobrenombre del deseado por el de rey felón y secretamente pide ayuda a Francia apoyado por sus partidarios absolutistas que están llenando el país de pequeños focos de rebelión entonando el terrorífico grito de "Vivan las caenas".

Luis XVIII no deja pasar esta ocasión de intervenir en la política española y manda un contingente de tropas para restaurar el régimen absolutista al sur de los Pirineos. Este contingente son los llamados "Cien mil hijos de san Luis", y efectivamente alrededor de 100.000 soldados (de 95.000 a 135.000 según las distintas fuentes) entran en España al mando del duque de Angulema y avanzan rápidamente hasta cercar al gobierno y al rey (que a regañadientes ha ido desplazándose con el ejecutivo) en la mítica ciudad de la resistencia antinapoleonica, Cadiz. Allí se da la gran batalla de esta guerra, la "Batalla del Trocadero". Tras ella las tropas liberales se rinden con la promesa real de que no se tomarían represalias. Y una vez mas Fernando VII hizo honor a su sobrenombre de rey felón incumpliendo una promesa mas. Vuelve a derrocar la constitución que ha jurado e instaura un régimen absolutista todavía mas duro que en su primera etapa. La represión es brutal comenzando por el propio Riego y siguiendo por destacados héroes de la Independencia. En esta época es cuando nace la conocida frase de "se te ve el plumero".

Y ahora la pregunta obligada. ¿Por qué se llamaban los Cien Mil Hijos de San Luis?. Pues todo viene en un rimbombante discurso que dio Luis XVIII ante las cámaras para justificar el envío de tropas a España. En el momento cumbre, buscando el aplauso fervoroso, soltó esta proclama: “Cien mil franceses, bajo el mando de un príncipe de mi familia, por aquel que mi corazón se complace en llamar mi hijo están preparados para marchar, invocando al Dios de San Luis, para mantener en el trono de España a un nieto de Enrique IV, preservar aquel bello reino de la ruina y reconciliarlo con Francia”.

Como era de esperar, de la respuesta nos surgen nuevas preguntas "corolarias":

-¿Quien era ese príncipe de su familia? esta es fácil, el ya mencionado duque de Angulema sobrino de Luis XVIII.

-¿Quien era el San Luis en cuestión? pues seguramente  Luis IX de Francia que reinó en el siglo XIII, llevado a los altares tras su muerte. Se le considera un rey-santo-héroe entre sus paisanos y fue el máximo impulsor de la Séptima y Octava Cruzadas.

-¿Quien es ese Enrique IV abuelo de Fernando VII?, ¿sus abuelos no fueron Carlos III de España y Felipe I de Parma? como nieto se refería a su descendiente, concretamente el mencionado Enrique IV era el bisabuelo de su tatarabuelo. Fue rey de Francia y el primero de la dinastía de los Borbones. El ser el primero de la dinastía común a los dos reinos le daba una importante carga simbólica al discurso.

Espero que os haya gustado la entrada y que sirva de agradecimiento a todos mis amables lectores que han conseguido que esta sea una  bitácora "cienmilvisitada".

Una vez mas, muchas gracias a todos.



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4 comentarios:

  1. Ay... "El Deseado" nunca un mote fue tan mal puesto a un monarca español, o eso creo, tendría que pensarlo. Cuantos españoles deseando su llegada para liberarlos del yugo francés y se encontraron con... un felón.

    Ah, y me olvidaba... te doblo en páginas vistas... ¡RÍNDETE!

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    Respuestas
    1. Razón tienes amigo Viriato, si lo quietas a él la competencia es muy fuerte, pero si lo incluyes gana de calle el premio al peor rey español de la historia.

      Y sobre tu última frase...

      Un saludazo y nos seguimos leyendo.

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  2. Mi querido Miguel Ángel, fiel a nuestra cibernética cita, vengo a felicitarte por partida doble; en primer lugar por el éxito de visitas a tu blog, mérito absolutamente indudable en este universo virtual donde a diario se abren miles y miles de posibilidades de páginas pero donde también sólo se consigue la fidelidad de los lectores a cambio de un trabajo cotidiano riguroso, muy bien hecho y siempre elegantemente presentado. Y es ahí donde radica la clave de tu éxito, porque ya lo adelantaba con sabio verso el poeta Ovidio, "Gutta cavat lapidem, consumitur anulus usu", 'Una gota horada una piedra, un anillo se desgasta por el uso', sentencia que fue ampliada en la Edad Media "Gutta cavat lapidem, non vi sed saepe cadendo", "Una gota horada una piedra, no por la fuerza sino por la constancia al caer'; porque es gota a gota, entrada a entrada, con tiempo, con paciencia, con dedicación, como se consiguen grandes resultados. ¡Enhorabuena, caro amico, por este éxito presente y por los futuros que están por venir!
    En segundo lugar, por la exposición amena, bien informada y clarificadora de esta referencia histórica de " Los Cien Mil Hijos de San Luis" que entra en el inventario de hiperbólicas expresiones donde encontramos otras tan discutibles (Jardiel Poncela dixit) como "Las once mil vírgenes de Sta. Úrsula", jajaja.
    Cienmil bicos tan "ad hoc" en esta ocasión.

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    Respuestas
    1. Muchas gracias por tus elogios y ánimos trufados (como era de esperar) de tus latinajos impulsivos.
      Y efectivamente Jardiel demuestra que en realidad bien pudieron ser solo once.

      Cien mil besets para ti.

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